UN FAVOR...

"El comienzo de la tarde una vez más instaba al aburrimiento, más todo cambió con aquel encuentro casual, de repente todo comenzó a tener luz, nada parecía oscuro, ni tan siquiera las noches lo eran, pero aún no se daba cuenta hasta donde llegarían aquellos días, ni aquellas interminables noches, en las que los sueños comenzaron a tornarse reales, los sentimientos se fueron volviendo locos peligrosos que no paraban, que iban creciendo, que se deshacían en encuentros, en querer más, a pesar que tuvo muchas oportunidades para quedar libre, no quería la libertad, la odiaba, y día tras día la odiaba más, tan sólo quería estar atada a aquel sueño que le entregaba todo lo que un día había pedido o soñado, que había convertido a su corazón en alegre canto, y a su alma en ligera pluma de encantados cuentos, pero ahora, nada de eso tenía sentido, ya no, los ojos se habían abierto, la decepción aparecido, ¿sería cierto que el amor nunca es eterno? ¿qué siempre acaba desilusionando? parece que sí, al final los sentimientos mutan, y un gesto, una palabra sacada de contexto, mil discusiones, y todo acaba con el encanto de soñar...todo se torna en terreno pantanoso, adquiriendo sentido lógico lo que antes no lo tenía, cierto, ¿cuándo había pensado qué las cosas sencillamente eran así?, la respuesta sencilla: nunca, en aquel entonces los sueños lo inundaban todo, no importaba nada más que soñar, sin embargo ahora, los ojos abiertos, le impedían seguir soñando, y lo más curioso de todo, es que había dejado de sentir, aquellos grandísimos sentimientos habían quedado abocados al olvido, porque al final había dejado de ser una marioneta en brazos de otro titiritero, ahora era una persona completa, y veía con claridad las cosas, no le importaba si el sol salía o no, si la noche llegaba, o era eterna, lo único que le importaba en realidad era dormir, pero dormir sin sueños, sin soñar, se acabó todo, ya no hay sueños, la pluma se ha caído al suelo, no salen letras hermosas, no sale de su corazón alegría, ya no, lo único que sale es la realidad...al fin que había llegado al estado tranquilo de tener paz, de ver con los ojos el mundo que la rodeaba, sin querer volar, sin nada más que no fuera anclarse en aquellos días de absoluta paz. Un sueño había sido todo un sueño, largo, tedioso, engañoso, quizás por momento hermoso, ¡pero tan pocos momentos!, ahora la luna simplemente era luna, satélite del planeta Tierra, no era más, no hablaba, ni cantaba, ni murmuraba frases al oído, no, ya no hacía nada de eso, no estaba viva, simplemente era un astro normal, que afectaba las mareas, que quizás atraía por su inmensa luz y belleza, pero...nada más. No era la protagonista de miles de cuentos, ni tan siquiera era el hada madrina de una loca escribiente que creía en los cuentos de hadas, no, ya no, ahora simplemente, era La Luna.  ¡Cuántas noches perdidas, cuántos días de soledad! , para acabar reconociendo que el amor no existe, y que mucho menos puede ser eterno. ¿Qué dura el amor? Un momento, un instante, una noche, un segundo, una mirada, un abrazo, una palabra, en definitiva, un encuentro, un momento de satisfacción sexual...¡Qué triste!! ¿A esto llamamos amor? ¿Desde cuándo recibió nombre algo tan efímero, tan embustero, tan mentiroso?. Simplemente la necesidad de compañía, eso es el llamado "amor", y a veces ni eso, tan sólo sexo, sin embargo nos empeñamos en creer que la luna nos hablará, que el sol dejará de salir si el amor no existe o no lo tenemos ¡cuán frágiles y vacíos somos el ser humano!. Una y otra vez volvemos a querer buscarlo, sin ser consciente que no buscamos otra cosa que alguien que quiera exactamente lo mismo que tú, y cuando lo encontramos, normalmente lo dejamos ir...la mayoría de las veces eso que realmente puede ser amor, nos da miedo, y lo perdemos, por no decir, por no luchar, por orgullo mal entendido, por tontos o estúpidos, sí, por eso, el ser humano es especialista en hacer tonterías y volverlas a repetir hasta el cansancio, en pensar si una vez salió mal, la próxima saldrá bien, no es capaz de asumir, que cuántas más veces se intente más mal saldrán...pero ¿quién soy yo para hablar de esto si nunca estuve enamorada? ¿si nunca entendí el amor real? ¿si tan sólo viví de mil cuentos creados para hacer soñar a un kui? ¿quién soy yo para decir que el amor no existe qué es inventado? ¿quién soy yo para decir hoy que existe el amor? sencillamente porque yo no lo sentí...sí, hipócrita, alguien ha debido conocerlo, y podría ser capaz de explicármelo, aunque dicen que el amor no se explica, se siente...incluso dicen que hay canciones que son un canto real al amor, sin embargo yo no creo hoy nada de esto, tan sólo sé que NO SIENTO, y que no puedo mostrar nada, porque si no me explican qué es el amor, no puedo seguir escribiendo sobre él, quizás vosotros tengáis una idea acertada de este extraño sentimiento, quizás creáis que existe, ¿qué tal si por una vez me alumbráis? es que el vacío es eterno, en mi, sí, ahora es tan frío, tan eterno, que escribir tan solo supone un verdadero ejercicio de fe, y me quedo mirando a Perséfone, a lo lejos, con su maravillosa aguja e hilo, y le preguntó: ¿Qué haces ahí? por qué me miras? y deja de tener sentido, simplemente su lágrima colgada al cuello, reluce, se aleja, se aleja de mi, porque sabe que no la siento...he dejado de sentir, no sé escribir versos, porque estoy a oscuras, no veo, no siento, no sé hacia donde va el tiempo...hasta infatigable luchadora del tiempo ha muerto, ya no lucha, ya no...porque de repente ha visto, ¡qué horrible es ver!. Ahora os pediré un favor, tan sólo uno, ¿me podéis devolver la fe? hacer que mis cuentos regresen? un poco de ayuda, tan sólo eso, una historia que me mueva el corazón, porque no puede vivir algo que está muerto, tan sólo puede ser arrastrado por el suelo, quizás entonces pueda volver a salir de los dedos una historia bonita, dónde llueva chocolate, o simplemente donde los ogros sean capaces de tener hijos verdes, o un caballo loco acabe besando a la protagonista de un cuento, ¡oh, eso si parece amor!, cierto, parece, nadie dijo que lo fuera, pero ahora se me hace imposible poder escribir eso, porque sencillamente mi alma anda de regreso a mi, y está perdida, demasiado, y mi corazón dejó de sentir, ¿sí, me hacéis el favor de darme fuerzas? puedo pediros eso?. Sé que no tengo derecho, pero no me gustaría cerrar esto, sintiéndo que el amor no existe, o dejando que Perséfone me mire llorando a lo lejos como si la hubiera alejado de mi, ¿me la regresáis? sí? por favor, la necesito, sé que la necesito pero soy incapaz de recuperarla...¡qué cansancio, qué de incoherencias! hasta ahora que me atrevo a pedir ayuda, que me digáis de vez en cuando que se puede caminar, que de vez en cuando la luna habla, y que sí, que los verdaderos kui (contadores de cuentos) existen, porque hace tanto que se fueron!!!! qué ya ni me acuerdo!! necesito la esencia, tan difícil es eso?...Gracias por vuestra ayuda, os la doy por adelantado, sé que al final, uno me dirá algo, me contará algo y resurgirán las alas de mis ángeles o mis demonios, o con suerte mi Perséfone vendrá a susurrarme al oído: Escribiente vive conmigo...mmm ¡ojalá pudiera hacerlo!¿quién sabe, igual me falta poco para visitarla? ¡quién sabe!!. Pues esta es la vida, no gustará esto, lo sé, no tiene nada que ver con mis cuentos locos, ni siquiera con mi desgarradora declaración de amor, ahí empezó el final de todo, ahí se abrieron las heridas, ahí di muerte a todo lo que poseía, no tiene sentido decir nada, ya no...¿qué tal si ahora me contáis un cuento? Sí, por favor, lo necesito, NECESITO VOLVER A VIVIR, nos vemos pronto, espero me déis alas, sino creo que al final quedará todo en la nada...sí, triste, ¡cómo la vida misma!.