domingo, 19 de enero de 2014

EGOISMO...


Y te vi no sirvió de nada, pero ahí estábamos , uno frente al otro, sin nada que decir, porque los labios no formulaban palabras todos los pensamientos se quedaban arremolinados en nuestra mente, difusa, incapaz de articular frases coherentes, era todo un lio, eramos nosotros, sin embargo en este momento no lo parecíamos, nos habíamos perdido el uno al  otro, intentando encontrarnos sin saber donde caminábamos, todo el sendero se ocultaba ante nuestros propios ojos por la ceguera de no querer ver más lo que tanto habíamos amado, olvidado y destrozado.
Volviste en el lugar mas inesperado, el dia menos pensado, en el único momento que pensé que no estarías y ahí estabas, los recuerdos volando uno a uno, de nuevo como sino hubiera pasado el tiempo como si toda la conexión volviera en ese segundo, en ese instante en ese momento resumido en palabras ritos , gestos, tú y yo , nadie más tan solo estando ahí sin que el tiempo hubiera pasado, sin que nadie más nos hubiera tocado, palabras silenciosas, reacciones de nuestros cuerpos, la misma unión el mismo sendero, NOSOTROS., los mismos…
Aunque ya no lo éramos, no, en el fondo seguía ese toque de control por obviar todo lo vivido, un momento loco en el que nos dejamos llevar por los deseos, por los sentimientos, por los recuerdos, todo estaba ahí intacto al paso del tiempo, pero teníamos que olvidarlo, que enterrarlo, no podía existir nada más, no podía repetirse, tan sólo había sido un regalo, de algo que jamás volvería, nuevamente el encuentro había sido en vano, guardamos todo lo que sentimos dentro, como siempre, una vez más, y probablemente no sería la última, pasábamos el uno al lado del otro en esta vida, en este camino, mirándonos de frente, sonriendo como entonces, como cuando nos conocimos, como cuando nos amamos…
Tus ojos volvían a adquirir vida, al igual que los míos, los nervios del encuentro nos delataba a ambos, esa sonrisa cómplice, esas caricias ocultas en nuestros rostros, en nuestros ojos, iban resbalándose casi sin querer por nuestras almas, el resto del mundo no existía, no importaba, porque el destino había querido una vez más que nos encontraramos, provocado por la casualidad, o no, ya ni eso importaba, aquí estábamos mirándonos nuevamente, deseando que el mundo se evaporase, desapareciera para quedarnos a solos, sin ser consciente de la mirada del resto de la gente, no existe el mundo, como siempre, solo nosotros, y el tiempo ha de pararse, justo en este momento, en el que nos miramos….
Ojos ajenos que están contemplando la escena, intentando compartir el momento, pero es imposible, no se puede compartir algo que no has tenido, que no has vivido, simplemente queda observar de lejos, guardar los sentimientos e intentar ser inmune al dolor que va creciendo por momentos, y refugiarse en la única persona que nunca le falla, que le da las fuerzas necesarias para seguir de pie afrontando hasta el último instante, observando, de vez en cuando sonriendo, accediendo a la conversación, en una situación tan irreal que parece un sueño raro, una pesadilla donde el corazón va muriendo…

Nosotros, los mismos, no lo parecemos, admitir una variable distinta en este juego nuestro ha cambiado las reglas, las risas locas, incontroladas, los desfases, los retos, nuestros momentos locos, nuestros besos, nuestros abrazos, en definitiva, LO NUESTRO…la melancolía va embargando el ambiente convirtiéndolo a pasos agigantados en nuestros propios recuerdos, sentimientos, en controlar cada uno lo que siente, sin saber en qué lugar posicionarse, sin ni siquiera saber cómo va a salir todo lo demás, solo sé que te he echado de menos, que necesito tu respirar, tus labios, tu cuerpo, y al tocarte siento como te estremeces, como me estremezco, con miedo, sé que ya no tengo derecho a hacerlo, lo sé, pero aún así no puedo evitarlo, sentir con todo, desear más allá, pero no puedo…nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos, pero el paso del tiempo no ha alterado para nada nuestros sentimientos, nos queremos por encima de todo, y de todos, incluso de la persona que nos observa, y no nos ha dejado solos  en este tiempo, tan al margen que también hace daño eso, pero, cómo evitar este sentimiento? Cómo intentar que se vaya la pena que sentimos? Te echo tanto de menos!!...no sé cómo comportarme a partir de este momento, sigo sintiendo lo mismo, queriendo lo mismo de ti, no, miento, quiero más de ti, ahora sí, pero cómo desaparecer las variables que incluimos en este destino nuestro?, lo sé, volverás, como siempre a mi lado, nada ni nadie puede ocupar mi lugar, ni ahora ni nunca, voy desechando las variables, quitándolas de nuestro camino, no importa nada mas que tú y yo, nosotros, los de siempre ya no somos los mismos, pero aquí estamos, enfrentando esta recta final, voy en tu busca, no importa quien nos observe, ni que sienta, ya no, mañana se cumplirá nuestro destino, uno en brazos del otro, entregados para siempre, haciendo que gire el tiempo, nosotros, los de siempre, volveremos a serlos, nada ni nadie va a interponerse en nuestro camino, al fin todo lo que soñamos se cumplirá, ella no existe, no , ya no, la he eliminado, he acabado con cualquier ilusión que pudiera tener, al fin, somos libres, nosotros los de entonces, seremos mejor que nunca, porque al fin somos libres para amarnos…

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