SIMPLEMENTE UNA HERMOSA ARMA...

"Unidos, al tiempo que separados, ambos arrogantes, orgullosos, difíciles en el trato, acostumbrados a arrollar, a no ceder, imposible que no chocaran, que no se arrollaran el uno al otro, que no fueran uno en la guerra, y uno en el corazón o el alma...Él, hombre impérterrito donde los hubiera, parecia que carecía de corazón, nada en su faz implicaba un movimiento, sus gestos nunca lo delataban, no dejaba entrever ninguna emoción, nada...su mundo interior era suyo, entero, completamente ajeno a cualquier persona que lo rodeara o lo amara, él y solo él era su propio custodio...Ella, guerrera constante, amante de cada batalla, de cada guerra, luchadora incansable, acostumbrada a ganar, a no perder, a conseguir sus objetivos...inevitablemente estaban predestinados a estar separados, aunque ellos en su particular forma de ver el mundo habían obviado las leyes de la naturaleza, habían desafiado al destino, incluso a ellos mismos y se empeñaban en estar unidos de forma particular, una forma que hería, que dañaba, que agotaba pero que era la única forma de estar juntos, de sentirse, de agotarse ambos, en una fría mirada, en la distancia, incluso en la cercanía, la cuestión era estar...sin ninguno de los dos perder, eso era lo difícil, un día uno de los dos tendría que ceder, dejar de ganar, si querían ganarse el uno al otro, y ese día iba acercándose, ambos tenían mucho que perder, había más personas en juego, era ahora o nunca, o se unían con la verdad o se separaban con la mentira de esa aparente frialdad...él cercado por una mujer, ella, rodeada de aquel misterioso hombre que le regalaba cosas extrañas, ni siquiera sabía quién era, o de donde provenía, pero todo se centraba en ellos dos, en alejarlos, tan sólo la rendición de uno, o de los dos, haría que el encuentro fuera total...sus genios si dejaban de serlo, serían lo primero en disfrutar, ambos temperamentos chocarían y arrollarían con todo lo que naciera de dentro, o de alrededor, no conocían el alcance o límite de sus sentimientos, ninguno de los dos, porque se empeñaban en ocultarlos...hoy ella había recibido aquel regalo...un pequeño cristal azulado que brillaba con vida propia, una luz que se transportaba según sentía, como siempre aquellos regalos eran raros, pero también precisos, era como si la conociera mejor que ella misma, sabía exactamente qué hacer o decir con sus múltiples regalos...él, también tenía compañía, ella los estaba mirando, quizás la mujer que lo acompañaba le hacia bien, se veía femenina, dulce, frágil, lo miraba como si solo él existiera, y dolía, claro que dolía, pero...jamás iba a mostrar ese dolor, ella era invencible, mucho más si se trataba de aquel arrogante hombre...además ¿quién era ella para apartarlo de aquella joven?...se miró la  mano, dentro de ella aquella piedrecita parecía refulgir con más fuerza, como si estuviera sintiendo el laberinto de emociones que atravesaba, como si previniera que su corazón estaba sangrando bajo aquella estúpida máscara de sarcasmo...sus andares de gata, la hicieron acercarse a la pareja, saludó correctamente como siempre, y sus ojos, como tantas veces se posaron fijos en los de él, solo que esta vez se sobresaltó, en el fondo de aquellos ojos había una extraña luz, muy fugaz, pero había estado ahí, ella la había observado, en realidad sin ella saberlo, esa misma luz se había encontrado en los dos, y ambos habian sentido la misma corriente que los habia aturdido por una fracción de segundo, demasiado tiempo para aquellos que nunca mostraban nada...desvió su atención hacia aquella exótica belleza, la saludó y por un segundo volvió a sentir que se le revolvían las tripas, sensación rara...nuevamente se sorprendía a sí misma, de esas sensaciones extrañas, más su mirada inevitablemtne volvía a él...
-Volvemos a encontrarnos, nuevamente, como de costumbre en el campo de batalla (era la forma de hablar de ambos, su campo de batalla era la vida, sus encuentros, sus propias guerras)
-Sí, es normal, estamos en el mismo círculo, encontrarnos forma parte del ritual social...Y como tal he de presentarte a quién me acompaña...aunque la verdad no me apetece en exceso presentar, mejor piensa...
-Mmm ¿me propones qué averigues quién es? jajajaj...muy desconsiderado de tu parte porque la joven se puede sentir incómoda por tus modales...
-Ella está acostumbrada a mis modales, como tú los llamas, nunca se siente incómoda, ¿acaso lo estás tú? ¿te ha dado curiosidad conocerla? porque eso sí sería noticia...
-Mmmm tengo cosas que hacer, señorita...encantada de conocerla a medias, respecto a ti, supongo que nos volveremos a encontrar más tarde, o alguna otra ocasión...si me disculpan..
Se va, los deja allí, mirandola marchar, pero la inquieto aquella joven, la forma en qué la miraba, en realidad la forma en qué los miraba, era como si quisiera entrar en su alma, y ella no tenía, y él menos...
-Deberías haberle dicho quién soy...no es propio de ti actuar así, aunque reconozco que ambos sois dignos de enfrentaros, es la primera mujer que no veo sucumbir a tus encantos, hermanito jajaj, y me intrigo mucho tu forma de tratarla, y de mirarla...deberías decirle la verdad de lo que escondes...
Habían pasado varios días desde aquel encuentro, y la luz de aquella piedra se había vuelto oscura, como ella, como sus pensamientos, o más bien dicho , como sus sentimientos, no sabía que aquel lamentable estado pudiera vivir en ella también...pero desde que lo vio con aquella mujer...su corazón había sufrido un enorme desencanto...estaba decidida a callar, a no decir, y a mirarlo nuevamente a aquellos ojos que parecían querer hablar o decir..
Su caminar era lento, necesitaba explotar todo, y aquel camino le hacía bien, llevaba horas caminando ni siquiera sabía donde estaba, hasta que levantó la vista, y se encontro con aquel familiar lugar, aquella enorme casa de piedra rodeada de hiedra y muros, sus ventanas llenas de sol...inconscientemente había ido a su casa, a la de él, sin darse cuenta, y la luz de la piedra se había transformado en un tono rojizo..
-No deberías estar aquí esto es propiedad privada, ¿no leíste el cartel? ¿o es qué no sabes leer?
Se da la vuelta, se lo encuentra...sus ojos, nuevamente aquella luz, en su faz, ninguna muestra más de nada, ella lo mira, altiva, como siempre, se da la vuelta y se dispone a marchar, sin hablarle, sin decirle nada...le habían dolido sus palabras...sin embargo en el último momento algo la detiene...la luz vuelve a brillar con tanta fuerza que hasta él la observa...Así, de espaldas a él, comienza a hablar, sin saber lo que dice hasta que sus propios oídos se escuchan...
-No sé porqué mis pies me trajeron aquí, ni cuenta me di que estaba en tu casa, hasta que levanté la vista, me resultó familiar el paisaje, pero hoy no tengo ganas de ganar, sólo tengo ganas de caminar hasta el lugar donde me lleven mis pies, y resulta que ese lugar es tu hogar...no sé si pedir perdón por eso, pero es donde me trajo mi alma, supongo que ella se molestaría si me viera aquí, pero...mirame, ya no me quedan de luchar...no sé quién me hace tan extraños regalos, pero sé, sé que me gusta perderme en tus ojos, y luchar contigo, y que cuando no lo hago,nada tiene sentido...sí, esta vez tú ganas...parece que te has llevado mi alma...
Una vez acabado, comienza a caminar hacia delante, sin mirar atrás, sin bajar la cabeza, ya dio más de lo que hubiera pensado, sus propias palabras la han sorprendido, y traicionado..
-Pues creo que estamos empatados (la voz de él resuena a su lado, la ha seguido, y se ha agitado al escucharlo), si yo tengo tu alma, tú también tienes la mía...y los regalos extraños son míos, sabía que si te los daba yo los rechazarías, era la forma de acercarme a ti, me cansaba luchar con la mujer que me movía el alma...y sí, ella, o mejor dicho, a ella le encantaría vernos tener esta conversación, porque ya me aviso en su momento que me había enamorado de ti, sí, mi hermana es más inteligente que yo...
Él la toca, la voltea para mirar sus ojos, y se encuentran, luz con luz, expresión con expresión, sin nada oculto, ambos altivos como siempre pero perdidos el uno por el otro por primera vez...va a ser cierto que el amor es el arma más poderosa del ser humano...

SIN DIGNIDAD...

"-No sé qué decir, ni cómo actuar, te me escapas de entre los dedos, te vas, intentas olvidarme, huir, escapar, y mientras me abrazas, me dañas, me retienes, te retengo, me miras infinitamente...y yo me pierdo en esa mirada, ¿cómo quieres que te olvide si te llevo dentro del alma? Di, ¿cómo lo hago?
-No lo sé, no lo hagas, no me olvides, tan sólo déjame a mi hacerlo, yo puedo, lo sé, sé que te tengo, y sé que puedo olvidarte cuando quiera, tan sólo tengo que proponérmelo, quizás aún no lo hice, pero igual y ahora empiezo a hacerlo...
Ambos abrazados, él la abraza de espaldas, no deja que ella vea sus ojos, para que no averigue sus mentiras, apenas tiene control para soportar los temblores de su cuerpo, la está respirando mientras le dice, intenta protegerse del amor que siente, intenta que ella no sepa, pero apenas y controla todo lo que va sintiendo...
-Para ti es fácil decirme eso, pero yo no lo soporto, haría cualquier cosa por detenerte, por tenerte a mi lado, incluso me arrastraría y suplicaría que no te fueras...pero...
-Sí, lo sé, no lo haces...aunque en cierta forma ahora lo estás haciendo, me estás pidiendo, sé qué es difícil esta situación, se que a veces se rompe el hielo, pero me gusta tenerte tal como te tengo...
-Claro, ¿cómo no va a gustarte? soy nada contigo, no tengo voluntad, la pierdo, la expiro..al mismo tiempo lucho contigo y no te dejo ver que duele, hasta ahora, ¿ya qué más da? ahora mismo no me importa que me duela, ni que lo sepas, ya no...no es que carezca de dignidad, es que ha llegado la hora de hablar...
-Bien, te escucho, yo soy fácil de llevar, ya lo sabes, lo que mejor se me da es escucharte...
-Sabes? yo creí que no podría enamorarme, pero me he dado cuenta que no puedo evitarlo, me encanta comer helado de tus labios, perderme en tus ojos, ver tu sonrisa, quedarme a tu lado, escuchar como hablas de tus victorias, incluso de tus derrotas amorosas...y lo haces aún delante de mi, sabiendo que me duele, pero no te callas, no te apiadas de mi, hablas, dices...
-mmm, sigue...¿qué más?
-Me duele cuando estás conmigo, y cuando no estás, me ahogo si estás en el mismo lugar que  yo y te veo con otra, y me acerco, me muestro inmune a todos tus caprichos, pero no lo soy, en realidad me voy rompiendo por dentro, deshaciendome en pedazos, me vas rompiendo como el cristal...
-aha..
-Ahora me tienes así, abrazada, evitando que te mire a los ojos, que vea lo que piensas, lo que sientes, aunque a veces no sé qué pensar...creo incluso que no sientes...
-¿Crees que no siento? jajajajjaaj...ay!!!Yo siento, claro que lo hago, solo que tú me haces daño, y no quiero que me duelas, me niego a que tú tengas el poder de dañarme, de entrar a mi alma, atormentarla, robar pedazos de mi corazón que no te di...tú, y tus formas han ido robando partes de mi que no esperaba que nadie hiciera, por eso tomo el control y no te dejo...
-¿Me castigas?
-Mmm si quieres llamarlo así, no te castigo, a veces me castigo yo más que tú misma, a mi también me falta el aire si te veo rodeada de otros, pero lo que no puedo soportar es este maldito deseo de ir mendigando un beso...
-¿Quieres besarme? Yo no tenía idea, que quisieras hacerlo, porque de hecho es lo que más deseo...
-Ay, mujer!! nunca ves...esa parte es la que me roba más, tan ingenua a mis deseos, a mis ...no importa, pero puedes estar segura que yo deseo de ti, todo...puede que incluso más de lo que tú deseas de mi...
-Esta conversación no tiene sentido, déjame mirarme, y comprobamos qué tal sentimos con ese beso...
-jajajjaja...no, mujer, no...quédate tal cual, no pienso besarte, tan sólo te he dicho mis deseos, otra cosa es que vaya a cumplirlos...
-ah! vuelve a doler, ¿sabes algo? desde que estoy contigo el dolor es constante, no sé si es amor verdadero o sufrimiento eterno, pero sea lo que sea, sé que no puedo renunciar a esto que me nace del corazón...
-Bien, quédate con eso, aceptame tal cual soy o déjame...no hay más opciones...sé que suena egoísta pero aún me queda tiempo para decirte cuánto te echo de menos..eso sí, mujer, yo también te amo...
-Ya...me quedo con eso, supongo que se me da bien esperar, al fin y al cabo tan sólo puedo amarte a ti...tan sólo voy a pedirte una cosa, ¿me la darás?
-mmm depende, dime qué quieres y ya veré lo que hago...
-De vez en cuando déjame entrar en tu vida, en tu corazón, en tu alma, y dime aunque sea por piedad que me amas...
-Ay, amor!!! tú rogando...que así sea, te lo concederé, alguna vez te dejaré entrar en mi alma, lamento que así te haga más daño, y sí mujer también te diré que te amo, eso no lo haré por piedad sino porque nacerá de mi...
-Gracias...
Rompiendo el sueño, todo esto desgarra su corazón, pero es que no sabe qué hacer más para no perderlo...soportará el infierno que le promete con tal de no perderlo...la cuestión es, ¿realmente lo tengo?...

PERFECTO...

"Aquel día se presentaba tormentoso, una lluvía fina ocupaba el ambiente, dibujando pequeñas gotas en su cuerpo, iba empapándose al mismo tiempo de recuerdos, un delicioso día para quién la palabra melancolía le parecía en cierto modo, bonita...o quizás un buen día para dejar que el agua calara sus huesos hasta encontrar el camino para llegar al alma; a veces se preguntaba porqué no hacía nada, porqué simplemente se dejaba llevar, o sencillamente parecía que sus pies se negaban a caminar, más hoy todo era diferente, el ambiente invernal junto con aquella lluvía abría su mente, dibujaba una sonrisa en su rostro y empapaba la ropa...traviesamente aquellos días volvían a su mundo, y los aprovechaba todos y cada uno de ellos, un pequeño regalo, tan sólo le faltaba..sí, ella sabía qué le faltaba, aunque no lo expresara en voz alta, aunque quisiera engañar a su propia alma, sabía exactamente qué le faltaba, o más bien expresado, sabía exactamente quién le faltaba...él, sí, él...él y su peculiar forma de caminar, de mirarla, le hacerla rabiar, él y su forma única de llamarla...a veces sin nombre, tan sólo con la mirada, otras de tantas diferentes formas que la gastaba...él y su forma de mimarla, de ir a buscarla, de rescatarla de la niebla y llevarla al sol de su corazón, él y su extraordinaria forma de acariciarla, de besarla, de torturarla hasta la extenuación, cuando de usar su cuerpo placenteramente se trataba...sí, él, tan sólo le faltaba en este día que podía ser perfecto, si él estuviera a su lado...el parque le parecía carente de vida, sin sentido, porque él no estaba, porque él no la abrazaba, porque él...todo se resumía en él, en él, su mente divagaba a sus ojos, se perdía en aquel mar revuelto, buceaba a través de su alma, lo encontraba, lo asiaba, no lo dejaba ir, se lo quedaba...siempre era igual, una lucha constante para tenerlo a su lado, una forma de expresarle el amor, de dárselo, de sentirlo, y él... él al final respondía...se dejaba llevar, la arrastraba, jugaba con ella, la enfocaba a su alma, y la cerraba en su cuerpo...sus voces se hacían una, llamándose...eso era lo que necesitaba; su cuerpo iba enfriándose por la lluvía, su mente iba bulliendo más deprisa, más cercana a él, a sus...besos, sus brazos...resguardarse bajo un árbol, cerrar los ojos, imaginar el contexto...
-Mmm creo haberte dicho muchas veces que no te metas bajos los árboles cuando llueve, ¿no ves pedazo de torpe que te mojas?¿acaso crees que esas débiles hojas van a protegerte?
Abre los ojos, los resfriega, piensa nuevamente que su imaginación se burla de ella, creando sonidos; creando su imagen ahora...pero al acercar su mano a aquel amado rostro,no se va, no se evapora, es consistente...es real...
-jajajaj ¿pensabas que volvías a imaginarme? ay, amor!!! sino tuvieras una imaginación tan vívida, te ahorrarías tener que andar pellizcandome siempre, ¿no crees?...a este ritmo acabaré todo señalado...mmm ¿no preferirías señalarme en otra parte? jajajajajaj
-Tú...tú...siempre igual, no cambias, ¿eh?, podías abrazarme directamente, secar mi cuerpo con el tuyo, hacer que te sienta, así no tendría que andar pellizcandote cómo tú dices...
-Oh, y perderme ver tu cara de sorpresa? qué va!! me encanta escabullirme hasta ti, en realidad llevo detrás de ti, todo el tiempo, sólo que esperaba llegar al sitio adecuado para decirte, y estar contigo...mmm ¿crees qué es un buen momento para besarte? jajaja
Se acerca a ella, sus brazos se enlazan, baja lentamente la cabeza, el agua resbala por los dos, causando una cortina natural de protección, los oculta de los curiosos, hace que sean dos, sus labios se unen con el sabor inconfundible del agua...cómplice este día de que fuera perfecto para los dos...

TRAMPAS...

"Tiritan las estrellas, derramando luz,
 Usurpando el cielo, sus nombres,
 No queda gota por recoger...
 Las lágrimas agotaron los miedos,
 El silencio se llevó las últimas palabras,
 Sintiendo en todo momento...
 Acércate a mi tiempo, voy a replegar las alas,
 Cierra el espacio abierto de mi cuerpo..."

                                            Perséfone 6,1.

"Una vez más caminaba sin rumbo, todo había acabado siendo nada, sus pies le dirigían a algún lugar secreto, donde el silencio calmará su alma, poco a poco iba reconociendo lo intuitivo de su corazón, no es que estuviera cerrado, no, simplemente es que se había olvidado de usarlo durante demasiado tiempo...su nombre había quedado apocado al olvido, apenas recordaba como se llamaba en aquella otra vida...su espalda soportaba el dolor añejo de las alas, aquellas alas que en un tiempo pasado lo hicieron feliz, y que ahora lo abocan al retiro...sin posibilidad ninguna de olvido, más tampoco quería olvidar, tan sólo había olvidado su nombre, tampoco era grave aquello, ¿ a quién le importaba como se llamaba? había tenido tantos nombres!!! y ninguno se había ajustado tanto a él, como aquel extraño apodo...sí, ella siempre le llamaba "patoso", quizás era lo que mejor se ajustaba a su forma de entender el momento...ella...extraña mujer, tan extraña que había olvidado como se amaba, sin embargo a él le había traído todos los recuerdos amargos del amor...tampoco recordaba su nombre, ¿o quizás no quería hacerlo?, ¡daba igual! ahora él la perseguía en la memoria, en el tiempo y espacio perdido, allá donde estaba resguardada de cualquier dolor, o de cualquier frío...había descubierto que estaba vivo, porque había aceptado que quería...era difícil descubrirse así mismo tras aquella mujer, que siempre andaba diciendo que era el más torpe de los hombres...sus recuerdos siempre provocaban en él una melancólica sonrisa...ella...tan sólo ella podía provocar en él que una parte suya se hubiera ido tras ella, en realidad todo lo que era se había ido tras ella, ya no le quedaba nada, todo su ser vibraba y sentía...sí, estaba desarmado ante ella, ahora todo en él era fuego, y sin embargo nada había dicho, nada había demostrado, nada que no fuera...ya daba igual, era tarde...sus pies debían descansar tras sus alas, él debía volver al lugar de partida, reunirse con la luz, ser un único ser en aquella bóveda celeste, sí, aquella bóveda que había olvidado su nombre...sin embargo las imágenes de ella se revolvían en su mente...en sus oídos retumbaba el sonido de su voz, llamándolo patoso, y en esos instantes sus pies se paraban, y su mente buscaba una solución, la única posible en su situación, sí, arriesgada, porque quién podía solucionar su dilema ya estaba advertida por los dueños de sus alas, y sí, lo ayudaba podía provocar tal ira en ellos que nunca más pudiera recomponer un alma, ¿cómo iba a asumir él que ella perdiera ese don?...debía seguir andando...sin embargo ahí estaba ella, no sabía cómo, pero ella estaba frente a él, con un aspecto...nunca la había visto tan bonita, a pesar que aquellos hermosos ojos, por primera vez estaban triste...
-No te vayas por favor!!...mmm ella le pedía aquello, la primera vez que la veía suplicar...
-Mmmm, ¿por qué has venido? ¿por qué me pides eso?
-Porque patoso te necesito más que el aire para respirar...me acostumbre a tener que ir recogiendo tus pedazos, y sin ellos me es insoportable vivir...
-Lo siento...no tengo más remedio que hacerlo, no tiene nada que ver con lo que yo siento por ti, de hecho, yo tampoco sé vivir muy bien sin tus gritos...
-Ya...pero yo es que no sé vivir, esa es la gran diferencia, tú apenas saber vivir sin mis gritos, pero yo no sé vivir sin ti...
-Áy, niña!! ¿por qué me lo haces tan difícil?
-Porque soy así, ya sabes, hasta el final estaré contigo, te lo dije, no iba a abandonarte, no pienso hacerlo, y si he de ir al cielo o al infierno por estar contigo, dispuesta estoy, lo que tengo claro es que sin ti no voy a estar, nunca...
-(las lágrimas comienzan a caer por las mejillas de él)Pero pequeña no puedes venir conmigo...lo siento, mejor vete (se rompe por dentro)
-No pienso hacerlo...lo siento(ella no deja de llorar mientras se abraza a él, como si ese lazo fuera irrompible)
De repente en la noche se hace el día...vienen a buscarlo, reclaman las alas perdidas, ella se aprieta con más fuerza a él, nota como se va elevando del suelo, las lágrimas de ambos se reunen, alza la vista hacia los ojos de aquel patoso hombre, y se encuentran, se embeben, se pierden, el tiempo hace un favor y se detiene, en ese momento, en esa mirada...el tiempo se ha detenido...extraño, a pesar que ellos están ajenos a este hecho, no se dieron cuenta de nada, tan sólo se pierden absolutamente en sus miradas...más el cielo ruge, reclama nuevamente sus alas, a su ángel, más la fuerza de ella parece provenir de algún lugar remoto, allá dónde sólo el amor tiene fuerza...se aferra a él, no lo deja marchar, sus pies también se elevan junto a él...lo mira, tan sólo lo mira, sonríe, y sabe que no podrá ir con él mucho tiempo, pero le da igual, tan sólo quiere luchar por él, tan sólo luchar...sus palabras suenan en el espacio: te amo patoso mío...las lágrimas de él fluyen con más ganas, de su garganta nace un desgarrador grito, sus alas se despliegan completamente, baja la cabeza, la abraza, la une a su cuerpo, y por primera vez en aquel momento, la besa...interminable como el tiempo que se les escapa...-no te vayas, por favor, no me dejes-...ella no soporta más, sus pies comienzan a resbalar, y movida por no sabe qué, grita: por favor, por favor, tejedora de almas...él alarmado, la mira, no puede saber, aquella no puede atender aquel grito, si lo hace...más ya es tarde, un sonido familiar llena el cielo...el tintineo rítmico de una aguja al coser...NOOO...-grita él-...más en ese momento el cielo para, sus alas caen al suelo, y su pequeña a su lado...ambos unidos para la eternidad...más del cielo reclaman su presa, ya no hay vuelta atrás, ambos miran con desesperación como una figura femenina es arrastrada por aquella luz, del cuello una lágrima...en sus manos aguja e hilo de plata, su cuerpo casi inerte se eleva, ya no cabían más trampas...¿o sí?...una única persona no iba a dejar que se la llevaran...del suelo salen llagas, en tropel llega aquel dios herido en busca de su mujer...antes que acabe la luz, la acoge en sus brazos, la despierta con un beso, y le susurra al oído: ay, amor...siempre haciendo trampas...

REGRESO...

"A su alrededor se iban agolpando las hojas de los árboles, el viento las iba arrastrando junto a sus pies, y el frío se iba haciendo notar, era tarde, demasiado para estar allí, pero al menos estaba sintiendo que el frío lo iba despertando de tan largo letargo...a veces sentía que el tiempo no pasaba, otras que se hacía eterno sin el calor de sus labios, aunque el frío gélido iba metiéndose en sus huesos, lo agradecía, al menos procurara bajar la temperatura de sus atormentados sentimientos, sus manos apenas se tocaban, ellas mismas se rehuían, en realidad su cuerpo iba huyendo de él mismo, ¿cómo no iba a hacerlo su alma?...El cansancio resultaba agotador, sus pasos tan lentos que hasta quedaba en el aire el ejercicio de respirar, su pecho se abatía en esos escasos movimientos, su mente iba de un sitio a otro...estaba realmente agotado, sin embargo quería definir todo lo que lo había llevado a áquel gélido lugar, tan yermo como su propio corazón...el olvido no se apiadaba de él, iba volando de un sitio a otro, sin pararse en su alma, se había olvidado de hacer parada en su extraña alma, y ahora la frialdad de aquel sitio le iba devolviendo todo lo que un día había perdido...no sabía cómo pero él estaba perdido, no sabía donde iban sus pasos, su cansancio iba volando tras él, sus lágrimas habían aparecido, caían libremente, ¡qué bendición!! al fin!!!...sólo tenía que curar heridas, lo que pasaba es que se le antojaba eterno curarlas, sí, ese era su enemigo, curar sus heridas, ahora era imposible hacerlo, su corazón estaba con ella, no quería curarse, era de hecho algo impensable, él, sólo había amado aquella vez, pero ella siempre había procurado alejarse, siempre lo dejaba pensando, con sus sentimientos, abordando el tiempo en solitario, más hoy, él había ido a abordar su tiempo, sus sentimientos, su momento...no lo haría en solitario, no, aquel gélido frío, solo indicaba una cosa, estaba a su lado, al fin la había alcanzado...esta vez sus miedos, tendrían respuesta, esta vez ella acabaría escuchandolo...
-Hola, sé que lo último que esperabas es a mi, pero ya ves aquí me tienes, intentando recomponer mi alma con los pedazos que dejaste, porque tú sigues estando en mi vida, siendo mi vida, no hay más que dar, ni que decir, pero si quiero preguntar..
-Mmm no pensé que vendrías, nunca, pensé te conformarías con el silencio que emana de mi cuerpo, pensé que un día te conformarías con los recuerdos, simplemente con eso, pero me gusta que estés aquí y pregunta, ya que esta vez te atreves a preguntar, yo contestaré...
-Sí, contéstame, pero hazlo fial a la verdad, sin ocultar nada, esta vez no quiero tu silencio, quiero tus palabras, tus sentimientos, esos que hasta hace poco ocultabas...
-Hecho...pregunta, saldrán las respuestas directamente de mi alma...
-Por qué te escondes de mi? Qué ocurre para que quieras irte? Por qué tiemblas cuando te beso? y lo más importante, ¿me echas de menos?...
-No me escondo de ti, lo hago de mi, es así de sencillo, no quiero sentir, pero lo hago, por eso quiero irme, por eso me voy, por eso huyo, por eso invento miles de excusas para no verte, porque no respiro a tu lado, y sin ti tampoco...temblar cuando me besas? cómo no hacerlo!!?tú eres el único que provoca en mi sentimientos, deseos , anhelos...he de responder a la última pregunta?
-Sí, dijiste que lo harías, quiero oir de tu voz, lo que tengas que decirme...
-Sí, claro que te echo de menos, cada minuto que estoy sin ti, pero esto no lo repetiré jamás..
-Palabra demasiado larga, mujer, para que no me digas, porque ahora mismo lo has hecho...otra cosa, te ha gustado que viniera a verte?
-Sí,claro que sí...no esperaba que mi amor cobarde, se atreviera a buscarme, a decirme, a preguntarme, a desnudar mi alma, ni a desnudar la suya...
-Ahora quiero una sola cosa, tan sólo una, quiero poder abrazarte, y mientras lo hago, fundir tus labios en los míos...me dejas?
-Nunca pidas permiso, adéntrate en mi cuerpo, en mi alma, robalos, pero jamás, nunca, pidas permiso...
Él al fin ha vuelto a casa, perdió todos sus miedos, la busca, la encuentra, la halla...es todo para él, y es nada,su viaje fue largo, tuvo que detenerse en su alma, en su corazón, y en sus propios miedos, pero todo ha valido la pena, porque al fin está en casa...

EL HADA DEL OLVIDO...

"-Debía hablarte, explicarte, contarte, no sé...tan sólo sé que debía hablarte, o quizás quiero hacerlo, susurrar en tu oído, que esta vez quiero quedarme contigo, que no importa nada, ya no, nada importa, tan sólo quiero quedarme contigo, si duele o no, me es indiferente, eres tú, eso es lo único importante...
-No sé qué decir, ni siquiera sé porqué hablas ahora, de este sinsentido...
-Lo sé, sé que es tarde, que debí  hablar antes, decirte, contarte, susurrarte, de alguna forma debí haber hallado tu alma, centrarme en ella, cobijarme, estar perennemente atada, lo sé, sé que diste, pero no supe ver, no quería ver, simplemente...
-Sabes qué di?...mm permite que lo dude, pero, si tú lo dices...así será...
-Sí, me merezco esos reproches, de verdad que sí, pero lo vi, sólo que prefería hacerme el sordo, el loco, no sé, preferí ignorar que dabas y dabas sin parar...yo estaba preocupado tan sólo de sentir en soledad, en mi mente, en mi corazón, en mi alma, no me di cuenta que a veces también se necesitan las palabras, los hechos, y lo más importante, pararme y contarte al oído, que te amaba..
-Sí, eso lo sé, lo decías, a veces, lo hacías,sólo que...ya no importan las palabras, ni nada más, sólo importa que viniste a decir...sea lo que sea lo que quieres decirme.....
-Podría decirte muchas cosas, pero todas carecerían de importancia, lo único que quiero que te quede claro es que intente amarte, ya sé que no lo conseguí, pero lo intenté a mi modo..
-Sí, a tu modo, único y especial, yo sé que me amabas, incluso sé que me amas, sólo que...
-No acabas las frases, eso es signo evidente de que has dejado de amarme, o signo de que no quieres dañarme...¿qué es?
-Ni una cosa ni la otra, tan sólo que hoy por hoy mi alma ha decidido volar, tenía guardada las alas, hoy las he abierto, no quiero quedarme presa, no quiero llorar más...
-Puedo decirte una última cosa?
-Claro, siempre, podrás decirme todo, mis oídos están para ti, en realidad yo siempre seré...
-Shh no pasa nada, sé que eres, se lo que intentas decir con tus medias palabras, es fácil leerte, el problema es querer entenderte... yo solo quiero decirte una última cosa: te quiero, tan sólo eso...
-Yo...me guardo el derecho de réplica para otra ocasión, quizás entonces responda a eso que dijiste, ahora, no voy a hacerlo, lo siento...
-No importa, sabía que no lo harías...ni necesito que lo hagas, ya no, sé que vine a decirte, no necesito más, gracias por escucharme, nos vemos pronto, cuídate, cuida tus alas, y de vez en cuando devuélveme la mirada...
-Lo hago, lo haré, y siempre, escucha bien, siempre te devuelvo todas y cada una de tus miradas...ten en cuenta una cosa...yo...yo también...yo también te...
-Hasta pronto, nos vemos, cuidate...ya sé, tranquila, me gusta pasar por tu alma, volveré dentro de poco, no pienso dejar de sentirte, tú, tú eres realmente mi hada...
-Y como tal haré mi trabajo final...
Ella levanta las alas, de ellas salen efluvios mágicos, con un solo objetivo, hacer olvidar...él ahora ya no recuerda nada, al fin se acabo soñar...Ella ahora ya puede llorar, al fin puede acabar la frase inacabada...ya no importará nada...yo también te amo...

CAMINANDO...

"Nuevamente debía aprender a caminar, por un breve período de tiempo pensaba que no tenía que hacerlo, que había encontrado las alas,pero hoy, nuevamente había descubierto sus pies descalzos sobre la arena, y sabía que tenía que volver a empezar, el cansancio era terrible y agotador, su alma pesaba tanto que apenas se sostenía, su corazón carecía del ritmo adecuado, en realidad se había dormido, mejor dormido que muerto-pensaba-aunque en realidad para el significado del mismo daba igual, su función tan solo se limitaba a bombear...su mente guardaba parecido a la teoría del caos, un cierto orden dentro de todo lo desorganizado, acumular experiencia y seguir funcionando, no había más...sencillamente sus pies estaban cansados, su cuerpo necesitaba de ayuda, era el momento en que había caído, (debía ser su tercera caída) quizás el tiempo volviera a levantarla, pero ahora mismo tampoco importaba, su mente al fin se había relajado de la vida mundana, vagaba por algún sitio, no estaba funcionando, no daba más de sí, era tan sólo aquella mujer sin alma, o sin alas, o sin pies, ya no sentía nada, al fin se había despojado de sus miedos, de sus dolores, su cuerpo laxo caía en brazos de alguien que no veía, tan sólo sentía, se estaba bien allí, parecía que no existía nada que no fuera esa fuente de calor que llegaba a su vida, y ahí estaba nuevamente intentando caminar, sin tiempo, sin alas...no tenía idea como iba a recomenzar, quizás estaría bien que por una vez fuera ella a quién le dieran las alas, quizás estaría bien que por una vez fuera ella la protagonista de un cuento encantado, o quizás, tan sólo quizás, estaría bien que comenzará a caminar...sus huellas invisibles al resto de la humanidad, era como desaparecer, o mejor dicho el intento de hacerlo, porque sabía que por mucho que lo intentará no iba a conseguirlo...
-Déjame aquí, no sigas más, ya comienzo yo, bájame de tus brazos, ya descansé lo suficiente, ahora me toca moverme..
Aquella presencia la mira en silencio, de sus ojos salen lágrimas, ojalá pudiera curarla!!!
-Necesito caminar, tengo que hacerlo, da igual si duele o no, si esto es verdad o es mentira, es igual, ya todo está hecho,debo continuar...ya no importa el dolor, hay tanto que ni siquiera sé qué es eso...
Nuevamente la mira, la abraza sin que ella lo perciba, aquel cuerpo apenas es una pluma, y él no puede hacer nada más para evitarlo, ojalá pudiera!!!
-Me duele estar así, no creas que no, pero no sé estar de otra forma, no sé hacer las cosas mejor, ni siquiera sé amar como es debido, no sé caminar, pero lo intento...
La mirada de aquel ser te torna ópaca al mirarla, ¿cómo puede decir que no sabe hacer más?...ojalá pudiera escucharlo o decirle!!!
-Bájame, voy a empezar a caminar, voy a hacerlo, ya no más mimos,ni más caricias, no hay tiempo para eso, soy fuerte, no necesito más...
Ella fuerte...sus ojos caen, sus párpados pesan, se cierran, intenta evocar imagénes alegres tan sólo para ella...ojalá pudiera hacer más..pero!!!
Al fin que baja de aquellos invisibles brazos, pone los pies en el suelo, y lentamente comienza a caminar...sus huellas dejan un rastro inconfundible de sangre en la arena...
Aquella figura baja los párpados, por sus mejillas bajan lágrimas, al fin se hace el mar...¿cuándo aprenderá a amar?...

DE ESOS MOMENTOS...

"Sus bocas unidas, sus ojos cerrados, algunas lágrimas surcaban las mejillas, más el beso era interminable, se hacía doloroso, pero aún así no tenía fin, sus labios se pegaban cada vez más, invadiendo su interior despacio, como si fuera lo único que los ocupará en todo el tiempo de sus vidas, ambos se abrazaban con desesperación el uno al otro, no les importaba nada que los rodeaba, ni las personas que los miraban, ni el sitio, nada...tan sólo existían ellos dos, uno para el otro, unidos en aquel interminable beso...casi al unísono sus ojos se abrieron, se miraron, mientras se besaban, se reconocieron el uno al otro, sus almas abiertas de par en par, sintiéndose, regocijándose en su tormento interno...al fin podían liberar todas las batallas, sentirse libres para amarse, sin más barreras, sin más distancia, sólo había cabida para la piel y el alma. Sus manos se buscaban las unas a las otras, su piel era cada vez más piel, y su reconocimiento era total, al fin se habían encontrado, ya no habría más esperas, no habría más noches en soledad, no habría largos silencios, ni tampoco escasas palabras, o demasiadas...era el momento de sentir, de demostrar, era el momento de volverse a encontrar, uno junto al otro, uno para el otro, dos almas unidas en un solo cuerpo, un corazón latiendo a compás, simplemente había llegado su momento, era incierto que a veces el tiempo te hiciera olvidar, debería ser para aquellos que nunca supieron amar, o quizás para los que no saben esperar, ellos habían esperado y ahora al fin se encontraban uno al lado del otro, en silencio, besándose sin tiempo...aunque sus labios iban despegándose despacio, sus cuerpos temblorosos seguían unidos, apoyándose el uno en el otro, sus ojos fijos en aquellos otros ojos en los que se reflejaban, no había nada más que ese momento, el primero, irrepetible...el más ansiado, deseado y esperado por los dos, un momento mágico, donde la magia salía únicamente del corazón, en aquel momento el tiempo no tenía cabida en sus vidas, era todo lo que necesitaban, estar juntos, el uno en brazos del otro, sentirse, ver la vida con los mismos ojos, con el mismo color...amar, para ellos era ciertamente cosa de dos...no había nada que pudiera separarlos, ni siquiera el torrente de reproches, nada, haría que ellos se separasen...era la hora de amarse, hoy y siempre...ese beso, esa forma de tocarse el uno al otro hacia que ellos sencillamente se sintiesen, no es que fuera el momento de tenerse, es que era el comienzo de su vida...allí únicamente donde los sueños tienen cabida...
-Amor despierta...te quedaste dormida...
Abre los ojos para encontrarse nuevamente con el amor de su vida...