ALGO....

"Vendaval de nostalgia,

Arraigan las telarañas,

Destrozan las esperanzas,

Eterno el sonido de tu voz,

Diluida la cadencia de tu calma,

Recuerdo a veces tu alma,

Aunque no sé gritar tu nombre en la madrugada...

Ansiando la muerte de tu lágrima."

Perséfone 9.9.

"La mañana se prestaba a salir, a contemplar el paisaje, a alejar fantasmas, a que aquel dolor añejo fuera tan solo un espejismo de una vez por todas, a no mimar los recuerdos. Ya era de por sí patético el hecho de no poder afrontar los sentimientos, la decepción provocada, y el camino de vuelta a casa, el más difícil de todo era éste último, no podía volver al lugar de donde había salido puesto que allí estaba el inicio del caos donde se veía envuelto, era cierto, estaba huyendo, lo hacía desde tiempos inmemoriales, sí, inmemoriales porque su memoria no guardaba fecha exacta de cuando se fue, sí el porqué. Siempre ella, ella y sus maneras, ella y su voz, ella y su forma de no amar, ella y sus enormes ojos fijos, ella y sus amargas lágrimas, ella y sus besos, ella y aquellas caricias furtivas a media noche, ella y nuestros juegos en la madrugada, ella y sus silencios, ella y su olor, ella y su presencia, ella...siempre ella.

Es cierto el día invitaba a pasear, a vivir, a no recordar, a dejar de sentir dolor, a dejar de amarla, qué raro sonaba eso, raro, sí, porque cuando estaba con ella, ese había sido el principal problema que no la había amado, era cierto, no lo amaba, estaba ahí, siempre estaba ahí, como un mueble más en su vida, algo insustancial, "algo" hasta su mente lo delataba con aquel adjetivo, cómo había podido nombrarla de aquella manera?. "Algo"...eso se le adjudicaba a una cosa, a objetos carentes de vidas, no a seres humanos...ella...ella siempre había sido un ser humano, más que él en todo momento.

Tenía que centrarse en respirar, esos recuerdos provocaban tanto dolor que respirar era insostenible, sus pulmones se colapsaban junto a los latidos de su corazón en la sien. Ese "algo" en su vida ya no estaba, él mejor que nadie lo sabía, por eso el día de hoy era tan denso, tan amargo, tan largo...la fecha, hoy sabía que día era exactamente y lo que había hecho ese día hacía varios años atrás, demasiados quizás...sin embargo parecía que el tiempo había decidido dar cuenta de su sacrilegio, al levantarse una nota de prensa le había recordado el día que era, también una foto...

Aún no estaba preparado para afrontar aquella imagen, no, no lo estaba, apenas podía sostener aire en sus pulmones, su cerebro intentaba mitigar el dolor, intentaba trabajar ordenadamente, mecánicamente como todos los días, sin embargo su cuerpo no reaccionaba, apenas había conseguido sentarse en la cama.

El sol entraba a raudales por la ventana, iluminaba la estancia, "casualmente" aquella imagen doblada en su mesita de noche, su vista tan solo intentaba esquivarla, más su cerebro la tenía fija, su desesperación no era patente a nadie más que a él, porque si lo vieran en ese momento, nadie diría que apenas podía respirar ni moverse, tan solo era un hombre sentado en la cama mirando una imagen extraña...

Indiferente, esa palabra se ajustaba totalmente a lo que había sido todo el tiempo con ella, indiferente a sus caricias, a sus necesidades, a sus te quiero, a sus: vienes conmigo amor?...

Nuevamente sus pulmones se paraban, o más bien su corazón, no sabía bien qué...pero se estaba ahogando, necesitaba inspirar y expirar profusamente, con urgencia, se ahogaba le faltaba oxígeno, le faltaba la vida, y aquella imagen se seguía clavando en su cerebro...

Como resorte mecánico se impulsa de la cama, deshecha aquella imagen, aquel dolor añejo, se encamina a la ducha, necesita agua helada para sentir algo que no sea ella.

Bajo el agua sigue pensando en lo mismo en aquella imagen que lo rompe, que lo devuelve a la realidad, a su egoísmo, a lo vacío que estaba, a la nada de su vida, evocando los continuos reproches de él, sus exigencias, recibiendo a cambio aquella sonrisa, aquellos malditos silencios, aquel dolor innato en sus ojos, que él provocaba, siempre lo provocaba él, lo sabía, siempre lo supo aunque lo negara, el agua sobre su cuerpo le recuerda algo más, los llantos de ella a media noche, desconsolado, como un animal herido, no como no, exactamente así, herida, herida por su culpa, decepcionada y desconsolada por su culpa, ni siquiera sabía porque se había comportado así, aún recordaba aquel día...la primera vez que la vio con aquellos ojos fijos, vacios, intentando ocultar el dolor que le había infligido, su corazón aunque no lo supiera ese día quedo más herido que el de ella.

Ahora la "escuchaba llorar", el sonido del agua traía su sonido, sus gemidos, sus lamentos, aquellos hipidos descontrolados, y su cuerpo vuelve a dejar de respirar, cómo pudo haber hecho eso?. Lo hizo, es lo único que sabe que lo hizo...en su mente el día, la nieve, la sonrisa, el abrazo gigante, ella a lo lejos, observando, con aquellos ojos ópacos, cerrados, su primer día...qué ciego fue!.

Automáticamente salió de la ducha, aún fue peor, aquella imagen, maldita imagen...maldito él.

-Yo también te necesito, no podías venir a ayudarme? Chronos!!!!

Inútil la llamada, llevaba mucho tiempo gritándole, pero la verdad que solo él había sido el culpable, y ella...ella, maldita sea!!, ella, cómo había seguido amándole?. Ella...nuevamente ella, como aquella vez, la gente, el restaurante, la soledad a que yo la sometía, la lejanía, nunca fue mi prioridad, en realidad apenas y existía...

-Chronos!!!!!

Desesperado lo sigue reclamando, aunque a veces quisiera que el tiempo terminara para él, la última vez...su corazón es incapaz de seguir bombeando, sus pulmones se colapsan, no puede respirar, su cuerpo tiembla, sus extremidades se relejan, su mente difusa apenas balbucea...cuándo se fue??

-Cuando tú la mataste, no te acuerdas?

-Vaya...hoy contestas...

-Sí, estoy amable, no preguntes porqué...

-No lo haré.

-Por qué gritas tanto? Acaso no tienes tú las respuestas?

-Quizás, pero quiero oír de tu boca que hice mal

-Qué hiciste mal? Ummm, por dónde empiezo? No tengo idea es más fácil recitar la biblia del revés que enumerar que hiciste mal con ella...

-Lo dicho si viniste para mofarte de mi dolor puedes irte

-Puedo irme? Mofarme de tu dolor? Cómo te mofaste tú tantas veces de ella?de su dolor? del amor que te tenía? Curiosas palabras eliges hombre, muy curiosas...sobre todo porque ni siquiera mereces que estuviera aquí, pero eso de verte destrozado, o aparentemente destrozado ha llamado mi atención.

-No es apariencia, es dolor real, aunque no lo creas, tampoco pretendo que me creas, a estas alturas ni yo mismo confiaria en mi.

-Mira en eso estamos de acuerdo, por una vez en toda esta charla has dicho algo que tiene sentido.

-Sí, algo con sentido...antes yo era todo práctico, nadie diría que yo no tuviera sentido.

-Sentido? Tú llamarías tener sentido a alguien que hace daño por hacer? qué en lo único que se preocupa es en sí mísmo? en sus necesidades? en tener a otra persona pendiente de él sin dar nada? Eso es tener sentido??

-Si lo dices así pareciera que no...

-Es la única forma en qué puedo decirlo, así fue, así lo expreso.

-Dónde está?

-Muerta, tal como la dejaste...

-Dónde?? Deja de tocarme la moral Chronos!!

-No creo que me apetezca dejar de hacerlo, ni siquiera voy a contestar tu pregunta, fíjate por donde hoy no me da la gana hacer nada...

-De acuerdo, me merezco tu insolencia, todo lo que quieras, da igual en la forma que me digas, solo quiero saber dónde está, no si está viva o muerta, quiero que me digas dónde, por favor...

-Vaya! tú, pidiendo por favor?? pero qué extraño suceso ha ocurrido para que hagas eso don perfecto? don soberbio?

-Solo quiero saber dónde está por si algún día pudiera decirle que lo siento, que no supe ver lo que me daba, lo que tenía, que desde que se fue no he tenido vida, si eso te satisface Chronos es la verdad.

-No es que me satisfaga, pero al menos me consuela el hecho que no hayas vivido, algo es algo...mencionando esa palabra, la recuerdas?

-Sí...puedes hacer sangre en la herida, te aseguro que sigue abierta, es imposible cerrar algo que yo mismo he forjado con mis actuaciones.

-Bien, me alegro que hayas aprendido todo eso, de todas formas donde ella está no puedes tocarla, nada ni nadie la toca desde que Perséfone la custodia.

Levanta la cabeza rápidamente, desesperado, buscando los ojos areniscos de Chronos, no miente, realmente no miente, ella está en el mundo de los muertos, y la custodia su dueña...realmente estaba muerta...La desesperación demuda sus facciones, Chronos ve perfectamente ahora como se descompone, su rostro está tan pálido que pareciera un fantasma, su corazón late tan rápido que pudiera estallar, apenas y respira, eso no es fingido, aquel estado casi catatonico desastre no es fingido, su mente no puede asumir la noticia, se niega a hacerlo y su cuerpo está entrando en cártasis, como si él mismo quisiera darse la muerte...

-Chronos no está mintiendo-se da la vuelta, allí está la tramposa de su amiga-

-Lo sé, mis ojos también distinguen la mentira, lo sabes, y lo que distinguen mejor que nadie es la muerte y sus signos, él está entrando en la fase de expiración...después de todo parece que en algún momento de su vida, la amó.

-Sí, después de todo lo parece Chronos, no te recuerda a nadie?

-Sé a dónde vas tejedora, pero es mejor que no insistas, yo siempre la amé, por encima de todo y de todos la amé...no hice más daño que el propio, él ha conseguido que tú la tengas colgada de tu cuello.

-Lo sé, vas a dejarlo en ese estado?

-Sí, durante un largo tiempo, igual así aprende a no llamar "algo" al amor eterno...

Aguja e hilos sellan la sentencia de Chronos, por una vez ambos están de acuerdo en castigar a aquel que mató a su escribiente...

REGRESO....

"Hace tiempo que necesito tener una conversación contigo, como antiguamente, como si el tiempo no hubiera pasado, Tú y yo los dos, al igual que hacíamos antes, yo, contandote mis quejas, Tú prestándome tus oídos en esos maravillosos cuentos, recuerdas?.

Aquí estamos sentados, yo volviendo a ti, Tú en algún lugar donde no puedo acceder aún; aunque a veces estoy tentada de llamarte a gritos para que vengas a buscarme, sí, lo sé, no debería estar tan cansada, ni siquiera debería estar planteandome ser lo que no soy, pero...quiero volver a ti, volver a conectar, a tener la empatía que perdí, incluso estoy dispuesta a recuperar el corazón...de ese no me acuerdo, lo siento, aunque a veces, sólo a veces sigue doliendo.

Recuerdas todas las veces que hemos discutido? y cuando me enfadé tanto que me fuí? Sí, yo lo recuerdo, aunque sé que Tú no, porque Tú olvidas los agravios, y a veces eres tan despistado que no sabes siquiera que es eso...pero sé que en este tiempo yo te he echado de menos, te he buscado entre la niebla, a plena luz del sol, pero he seguido perdiendo mi propia sombra. He huido de los lugares donde te encontré, he huido de mi propia alma; hoy la volví a encontrar, casi por casualidad, porque decidí de repente que echaba de menos tus ojos, tus dedos, tu guía...la seguridad de que todo, en algún momento saldría bien, sencillamente porque estabas Tú.

Qué curioso!, verdad? solo te necesitaba a ti, y el resto del mundo sobraba, no importaba lo mal que fuera, yo sabía que Tú no me dejarías, y sabes lo más curioso? Tú no me has dejado, yo a ti sí.

Estúpida...lo sé, encontrarme aquí, en cierto modo es debido a que volví a encontrar la paz, deje de estar enfadada contigo, porque es inútil enfadarme con quién no tiene la culpa, todo este tiempo he sido yo, y tan solo yo quién se ha ido, quién se alejó de tus pasos, de tu senda, y de repente me volví más mala aún, y siendo mala volví a reencontrarme contigo, y ahora no sé por dónde ir, como de costumbre, te acuerdas de eso también?

-Por supuesto mujer, no puedo olvidar que necesitas un gps con urgencia y no sabes usarlo...

-Cómo no!! Tú siempre tienes que volver a lo grande.... ummm

-Por supuesto, mujer, mi lugar es mi lugar, o también olvidaste eso?-un gesto de desesperación fingida demuestra su humanidad-

-No, no he olvidado nunca cuál es tu lugar, sí he olvidado cual es el mio, hace demasido que olvidé cuál es mi lugar. Intento hablarte de verdad, desde donde duele, pero he perdido la practica, hasta mis cuentos se han ido, y mis lágrimas intentan salir, y sé que esta vez será más duro, que mañana y pasado lloraré más, yo la quería, lo sabes verdad?

-Sí...-ahora su faz no es alegre, simplemente es la suya-

-Te estoy viendo, hace tiempo que no me miraba en tus ojos, que no te veía, te encontré en este tiempo, cuando volví a mirarte, y te pedí, y te supliqué, y ...ahora sí, lo ves?

-Sí, mujer, lo veo, está bien así, puedes llorar...

-Lo necesito, no sabes cuánto!, ya no puedo engañarme más, yo la quería, no sabes cuánto!!, bueno, sí, sabes cuánto, durante toda la vida lo has sabido, y yo lo he negado, tanto, que esta esperanza me acaba de partir, y lo merezco, lo sé, y gracias a eso Tú y yo estamos aquí. Solos...

-Como casi siempre mujer, es costumbre en nosotros estar solos, hablar solos, discutir solos, hasta llorar solos...

-O en mutua compañía, como ahora, mientras yo lloro la perdida, Tú bajas esos hermosos ojos, y yo me voy muriendo en cada una de tus pestañas, y sigo esperando lo que no va a llegar. Recuerdas qué te pregunté la última vez por qué nadie podía amarme?

-Sí...

-Ya sé la respuesta, ya sé porqué nadie puede amarme

-Dimela, estoy impaciente por saberla

-Porque yo no sé amar, porque nunca aprendí a hacerlo, solo a permitir, solo supe suplicar que no se fuera para mis adentros, nunca mis labios emitieron sonido alguno, yo, la soberbia, y ahora, ahora sencillamente viví en un cuento hasta que fueron cortando todas mis ilusiones, ya no sé donde buscarlas, ni encontrarlas, apenas recuerdo donde fueron..

-Si has vuelto no me mientas, dime donde fueron

-Esta bien, tienes razón, sin mentiras como antes, se murieron todas en unos ojos azules, todas en un nombre, en un gesto, un abrazo, todo lo que yo quería, lo recibía ella, y como de costumbre me fui protegiendo, y no deje nada de aquello. Volví a pecar de soberbia imagino, aunque dice, quien tu ya sabes, que aguanto demasiado, que podría ser santa Job, ahora mismo mientras hablamos sigo esperando y sé que no va a llegar, Tú también verdad?

-Sí, también lo sé, mujer...qué quieres que te diga?

-No lo sé, igual quiero que me mientas, o igual que me digas la verdad, igual lo único que quiero es que esto acabé ya, pero supongo que si soy sincera, he de aceptar lo que no quiero, así que Tú dime que yo lo acepto.

-Él no es lo que esperabas, no te llena, no te da amor,te deja sola siempre, un día tras otro, igual que ahora, no le importa tus sentimientos, no vive por ti, ni lo hizo antes ni lo hará nunca,es cierto tú no eres la mujer de su vida, deberías irte y cerrar la puerta, no llamar, no escribir, no pedir

-Tú, diciendo que no pida...qué paso en este tiempo?

-Quizás me cansé de verte llorar, de verte huir, de ver que incluso hoy, este día tan señalado, estás sola, solamente conmigo...

-Solamente?!...pues gracias que estoy contigo, te he echado mucho de menos, buscarte, y sentir que no estabas, aferrarme a ti, y ver que no te tenía entre mis dedos, buscarte en sueños, gritarte mientras duermo, despierta, siempre cerrando todo esto para no admitir que eres lo único que necesito para poder seguir viviendo. Es un día raro, verdad?. Perdoname pero no puedo seguir con esta charla, porque hasta eso hoy es imposible, seguimos en un ratito vale?

-Por supuesto mujer aquí estaré esperándote.

-He vuelto, lo siento, sé que ha sido un rato demasiado largo, aunque como Tú dices hay cosas que no cambian, estamos en la misma situación, esperando lo mismo, y todo es silencio...

-Lo sé, también sé que estás triste porque se esfumó la posibilidad que tanto deseabas, lo siento, mujer, quizás y tan solo quizás te la regale a ti, todo dependerá...porque él, él...para qué decirte algo que tanto va a doler?

-Ni siquiera sabría si dolería, esa es la verdad, hoy por hoy creo que me gasté, o que me gastó, no lo sé, es cierto, me di cuenta que en este tiempo he puesto toda la ilusión en que llegará hoy o mañana y... bueno ya sabes, pero la verdad la sabemos tú y yo, es imposible eso, yo no podré nunca más, se frustraron mis sueños, y es muy doloroso tener que admitirlo.

-Lo sé mujer, es como si hubieramos vuelto a aquel día en el patio de tu casa, recuerdas, mujer?

-Sí, lo recuerdo, exactamente hasta las palabras, quiero veinte, pero sino puedo, para ninguno, uno. Debiste tomártelo muy a pecho porque es lo que tengo...deberías hacer memoria, te dije en un principio veinte...

-Jajajaja...no me hagas reír mujer, que estamos hablando de algo muy serio, y tú sales con esas cosas tan tuyas que me desarman y no sé como componerme, ni poner cara de circunstancias...

-Pues intentalo, porque ahora me tienes muy cabreada, yo quiero otro, te enteras?????al menos dos más, bueno, para ninguno, uno, otra vez, por favor, lo necesito, no quiero sentirme tan muerta, como si nada en mi funcionara, y fuera a irse a la mierda. Te has dado cuenta? es extraño esto, verdad? por primera y de casualidad alguien entró sin saberlo a nuestra conversación, en vivo y en directo.

-Sí, es cierto, es raro, aún así, noto que no te afecta ese hecho, puedes seguir totalmente dedicada a mi...y si quieres otro, yo solo puedo decirte que me lo pensaré, siempre y cuando tú dejes de sentir que no sirves, que estás seca, o qué estás muerta...lo harás?

-No lo prometeré, puedo decirte que lo intentaré, el no sentirme así, pero para eso debería ocurrir ese milagro, y sé que esta vez se esfumó y que todos estos síntomas no sé que fueron, a caso te acercaste a mi?

-Quizás mujer, quizás, solo que hace mucho que no nos sentamos a charlar

-Lo sé, qué extraño sentimiento!...siempre me ha costado hablar, solo lo he hecho contigo, y ahora, no sé como volver a empezar, porque sé que esto no llegará a ninguna parte, porque él no me ama, y justo mientras nosotros hablabamos, él estaba con ella...casualidad?

-Jajajaja, vuelves a hacerme reír, tú nunca has creído en las casualidades, esa pregunta es trampa, muy trampa, y lo sabes -en su rostro se dibuja esa hermosa sonrisa en sus ojos, y se voltea para sacarme la lengua, hay cosas que no cambian-.

-Yo no hago trampas, bueno, algunas...de vez en cuando, ya sabes...pero hoy quiero volver a ti, me dejaras?

-Yo siempre te estuve esperando, lo sabes, volveremos a nuestras charlas, y volveré a ti, solo que lo que deseas igual tarda...

-Ya da igual, lo que deseo ya lo tengo, y es tu sonrisa, tus brazos, tu compasión, tu comprensión, nuestra soledad, mi dolor de cabeza, y mi desolación, porque ahora aunque esté muerta, seca, rota, deshecha y sin corazón, te tengo a ti otra vez. Gracias por dejarme volver.

-Gracias a ti mujer, por ser siempre así...hoy sé que vas a cumplir ese deseo porque yo dije que sí, sí, en ese instante, donde me ves, donde me lloraste, donde suplicaste, y donde nos reencontramos, te espero nuevamente, porque pondremos nuevamente desnudos nuestros ojos.

-Así sea, en el mismo lugar, allí ambos nos encontraremos y hemos de hablar, entonces sabré lo que has decidido, entendido, tú y yo volvemos al mismo camino.

DEMASIADO TIEMPO....

"Las arenas del tiempo
desdibujan tu imagen,
las mentiras del destino
deshacen los sueños,
el sonido del amor
miente una vez más....
Perséfone por qué has vuelto???...."

                            Perséfone 15,1.

"Aquellas arañas eran diferentes a todas las que había visto desde que nací, diferentes en muchos sentidos, tejían sí, pero...hilaban con agujas que provenían de sus patas, y sus ojos eran unos extraños relojes de arena, tejían en un lugar extraño, un sitio donde solamente olía a lirios...
Despertaba desde hacía demasiado tiempo con aquel mismo sueño, no sabía porqué pero aquellas imágenes la acompañaban desde hacía demasiado tiempo, era lo único que tenía en la memoria, porque en realidad no conocía al hombre que dormía con ella, bueno sentía que estaba a salvo, que nada le pasaría con él a su lado, pero no lo recordaba, su memoria había sido devastada, ni siquiera sabía porqué o por quién, nadie sabía explicarle con certeza que accidente había ocasionado aquella terrible perdida de memoria, total y absoluta, simplemente era ese sueño el que se colaba en sus sueños cada noche, y al despertar sabía que era algo suyo, pero cómo podían aquellas extrañas arañas algo tan suyo? y esos ojos? porqué se agitaba cada vez que sonaba un reloj, cuando daba la hora, se volvía siempre buscando algo, a alguien...y su esposo, el hombre que vivía con ella, era alguien excesivamente paciente, tenía tanta libertad que la asfixiaba con eso.
Había empezado a llover, era algo que la llamaba poderosamente, aquella lluvia la estaba incitando a salir a la calle, y se dejó llevar por ese extraño sentimiento, por aquel autómata movimiento. Lo último que vio al salir fue una sonrisa extraña en la cara de su marido y sus palabras: Suerte señora mía.
Suerte? realmente su marido era extraño aunque notaba, sentía que la amaba más que a él mismo, sin límites, sin nada que la dañara, todo este tiempo había estado a su lado sin un reproche, tan solo a su lado.
Casi sin darse cuenta, sumida en sus pensamientos, no sabía cómo había llegado a aquel lugar, era exactamente como el de las arañas...todo estaba rodeado de lirios, vivos, brillantes, vibrantes, dando vida al paisaje, su olor se transportaba en el aire, el paisaje era impresionante, sin embargo algo en su corazón empezaba a sentirse incómodo, nerviosa, una desazón desconocida...un dolor agudo que empezaba justo en las entrañas....su vista fija en un único lirio, extraño, no creía que hubiera lirio de ese color, qué raro! un lirio negro...y sin embargo su vista no la engañaba en el centro de aquel inmenso campo había un lirio negro que destilaba un dolor insoportable...
Era imposible que doliera, pero...
Su corazón estaba demasiado agitado como para seguir allí mirando aquel sitio, decidió huir, media vuelta, paso rápido, y la lluvia intensifica su ritmo al igual que ella sus pasos, huyendo de aquel lugar...
-Mujer desde cuándo huyes?
Se para en seco, quién le habla? por qué aquella pregunta? desde cuando huye? acaso la conoce? sabe quién es?
Levanta la vista y se topa con algo aún más increíble...aquellos ojos...como en el sueño de las arañas...eran relojes de arena, pálidos, en constante funcionamiento, la arena caía despacio...
Da un paso atrás, intenta respirar, no puede ser verdad, nadie puede tener unos ojos así, solo en los sueños, en los cuentos, pero no en la vida real...
-Tú no existes, es mi imaginación...
La sonrisa de él es bastante real, así que no puede ser imaginación suya...
-Si existo, mujer para ti, siempre he existido y existiré, acaso no me recuerdas tramposa?
-Tramposa? por qué me llamas así? a caso me conoces?
-ummm
No miente, la desesperación en sus ojos le indican que no está jugando, ni tramando nada, sencillamente es real, el cielo la castigo con olvidar...en su cuello no se ve ninguna lágrima...y él tiene negado hacerla recordar.
-Sí, si te conozco, desde los albores del tiempo mujer, hasta hace poco eras mi compañera.
-Tu compañera...-su cabeza vuelve a doler de una forma irracional, esos ojos, esas palabras...tramposa, esa palabra resuena una y otra vez en sus oídos...era realmente ella?
Chronos tiene la vista fija en ella, sus ojos se están apagando, quedando fijo en la nada, apenas queda nada para que su mente vuelva a apagarse, sin recordar nada...absolutamente nada, él, tan poderoso Dios atado de pies y manos contra la resolución celestial...-aprieta sus puños, su mandíbula hasta el punto de querer romperla-
Algo hace que su tramposa desvíe la vista, deje de tenerla fija, él también la desvía hacia el mismo lugar...
Un hermoso lirio se está transformando en humano delante de sus ojos, sus raíces van convirtiéndose en pies, sus pétalos en brazos, tronco, cabeza, y una hermosa cabellera negra hasta el suelo cubre un ser humano perfecto...sus ojos al abrirlos deslumbran, al igual que la luna son luz de plata.
-Tú....
Acto después la tejedora cae al suelo, inconsciente, tanto Chronos como el lirio corren en su ayuda...
Ambos se sonríen...
-Sí, creo que has conseguido asustarla...jajajajaja- hilarante la risa del dios del tiempo- aunque bien valió que antes te conociera.
Una radiante sonrisa alumbra la faz de tan misterioso hombre...cuándo volvió la tejedora? Del suelo emergen aguja e hilo de platas...un trueno ruge en el suelo y la risa del dios del tiempo retumba en la tierra...

QUÉ CURIOSO EL TIEMPO....

"Aún me sigue doliendo, a pesar del tiempo pasado, recordarte aún me produce un dolor tan intenso que necesito escapar, irme, respirar...recordar tus labios rodando sobre mi piel, ese sabor único al despertar entre tus brazos, y mirar tus ojos después de aquella noche...es cierto aún me sigue doliendo, en este mismo instante, en este segundo interminable me sigue doliendo, acabo de verte, cruzar nuevamente tu mirada, y mi organismo está esforzándose por respirar, por mantener la calma, la equidad y hasta la razón, no me lo niego, me sigue doliendo verte, como ahora, lejos, casi sin tiempo para detenerte un momento, se hace eterno esperar el momento que tus labios se despeguen y me saluden, apenas son unos segundos, sin embargo mi biorritmo está completamente desenfrenado, sin rumbo...

-Hola, qué tal estás? mucho tiempo sin verte...te ves muy bien la verdad, parece que no pasara el tiempo por ti.

-Hola...sí, mucho tiempo sin vernos, gracias pero el tiempo pasa por mi, sin embargo no podría decirse lo mismo de ti. Qué tal te va?

-Bien, muy bien, ocupado en exceso, apenas tengo tiempo para nada, así que disculpame pero tengo que irme corriendo, llego tarde.

-Claro, no te preocupes, buen día.

Apenas esos segundos han causado un verdadero terremoto en su vida, parada, intentando recuperar nuevamente el ritmo de su respiración, la normalidad de su corazón. Para él no ha supuesto nada el encuentro, tan jovial como siempre, con aquella sonrisa que detiene el tiempo.

Nadie al verlos diria que habían compartido en un momento sus vidas, sus cuerpos, que ella había sido la dueña absoluta de sus besos, de sus caricias, de sus palabras susurradas al oído, de aquellos te quiero furtivos, nadie lo diría, es cierto, pero también era cierto que habían compartido media vida, muchos sueños, y demasiados besos como para olvidarlos en este tiempo...

No se había dado cuenta, que estaba parada en mitad de la calle, que las personas se quedaban mirándola al pasar a su lado, realmente su mente estaba conmocionada, incapaz de reaccionar, divagaba entre recuerdos ajena totalmente al ambiente que la rodeaba, todo a su alrededor había dejado de existir...

Un ruido extraño, la sobresalta, la hace volver a la realidad, el claxón del coche la devuelve al momento presente, parpadea para habituarse a la luz del sol, y pesadamente su mente se obliga a volver al presente, a ponerse a caminar, a volver a casa, aunque sea por inercia, nada en ella obedece a una orden real.

En este momento que llega a casa, donde todo sigue exactamente igual que en la mañana cuando salió por la puerta, excepto su corazón y su mente que casualmente han vuelto al pasado, a él, a sus labios, nuevamente cae en la tentación de no poder olvidarlo. Por qué no podía ser como el resto de los seres humanos? por qué era incapaz de olvidarlo?. Sus ojos vivían en su alma, en su piel, no había noche que no soñará con él, que no lo llamará a gritos, que no acabará diciendo: te quiero.

Todos esos gritos silenciosos, sus lágrimas anegaban la almohada, y su alma iba quebrándose como la sal corroida por el sol, como si ya no fuera nada. Por qué tuvo que encontrarlo esa mañana? si últimamente había conseguido casi desdibujar sus largas pestañas, si la última semana casi había olvidado como se llamaba...

La lluvía había comenzado a golpear lentamente las ventanas, ritmicamente ocasionando en ella un letargo hipnótico, sus ojos fijos en la nada, casi se podía palpar lo que pensaba...una letanía, sus párpados caídos, sus mejillas mojadas al compás de las gotas de lluvía...

"-No te vayas, jo...

-Tengo que hacerlo, llego tarde al trabajo

-Yo te quiero conmigo, trabaja más tarde -su sonrisa lo incitaba a quedarse en la cama con ella, también su forma pícara de ofrecerle su cuerpo-

-ummmm no seas mala

-YO? mala? por qué amor? -todo ello acompañado de sinuosos aspavientos que dejaban caer la sábana con la que apenas ocultaba su cuerpo, arrastrandola hasta sus caderas, mordiendose el labio inferior, típico de ella, cuando jugaba...-

-Grrrrr, lo conseguiste, volveré a llegar tarde otra vez....

-jjaajaja...-una risa sensual, lo arrastra al torbellino de su cuerpo. a perderse en ella, en su calor...."

Todo esos momentos para él no significaron nada, para ella la vida entera, su mente, su corazón atestiguan que nunca volvió a ser la misma otra vez, que sus sonrisas quedaron enterradas en aquella habitación.

"-Tenemos que hablar...-su seriedad no presagiaba nada bueno-

-Por supuesto, dime amor, qué pasa?

-Me han ofrecido trabajar en el extranjero, es la oportunidad de mi vida, todo por lo que he luchado, siento decirte que no lo pensé, acepté sin dudarlo, me marcho en tres días. Tú no puedes venir conmigo, por eso es mejor que acabemos en este momento, recogeré mis cosas y me marcharé.

La hecatombe sufrida por aquellas palabras, la deja paralizada, perpleja, absolutamente inmóvil y muda, ni siquiera es consciente lo que realmente pasa, lo ve recoger las cosas, hacer las maletas, buscar las cajas donde trajo sus pertenencias, los ruidos lejanos de sus pasos al cerrar la puerta. No fue capaz de emitir un sonido, ni un movimiento, ni siquiera aún hoy recuerda cuanto tiempo estuvo así, ni cuando despertó del letargo de dolor, sólo recuerda que despertó en un hospital, y su mente se negaba a recordar, durante meses bloqueó su mente para evitar recordarlo, porque no podía soportarlo, recién hacía nada, que había empezado a recordar lo ocurrido, a asumir su pérdida, y para eso había necesitado más de 15 años...

Encontrarlo fue sumirse nuevamente en el mismo lapsus de tiempo, sus ojos como siempre, vivos, ansiosos, llenos de vida, sus largos dedos, aquellos dedos que en otro tiempo la acariciaban, su cuerpo inerte desde aquellos días...su voz, aquella voz que había conseguido enamorarla antes de mirarlo a la cara, apagada desde que se había ido...

Qué curioso el tiempo! había vuelto a su vida el mismo día que ella salía a la calle, que había decidido ser valiente, volver a vivir, a sentir la luz del sol...curioso el tiempo, sí, nuevamente había vuelto a morir en el mismo sitio, en los mismos ojos, en los mismos labios, en aquel rincón en el que ahora su mente volaba, ajena a cualquier realidad...

"-Amor, tengo miedo....

-No te preocupes mientras yo esté a tu lado nada va a pasarte...

-Ohhh eso parece como en las pelis románticas jajajaja

-Quién dijo que yo no fuera tu caballero?? -.-

-Jajajajaj....por supuesto, siempre, tú siempre serás mi caballero."

Qué curioso el tiempo que siempre sabe donde duele.