Donde los sueños tienen cabida siempre, acá donde el alma nace, se reproduce, crece, y de vez en cuando muere, siempre en las alas del amor que te da el alma, sencillamente viviremos los sueños...
martes, 2 de febrero de 2016
PRESENTACIÓN...
"El sitio donde se encontraba volvía a ser inhóspito como antaño, como la primera vez que pisó el lugar, a veces olvidaba el porqué volvía a aquel sitio de vez en cuando a lo largo de los siglos, pero hoy recordaba que era el día, que precisamente hoy tenía que volver sobre sus pasos y regresar al lugar de donde provenía.
Los árboles lo observaban puesto que esta vez hacía demasiado tiempo que no había pisado el lugar de donde salió, donde ellos lo criaron, aún así, a pesar de estar observándolo no emitían sonido alguno, era mejor seguir sus pasos en silencio.
Su caminar era lento pero seguro, su vista giraba alrededor de su lugar de nacimiento, las nubes, el azul del cielo, las flores, los árboles...parecía que nada había cambiado sin embargo él sabía que habían cambiado muchas cosas, en todos los aspectos de su vida, nada era como aquel día...
Su mente se permite el lujo de regresar al primer día de su vida en aquel sitio:
"Su espalda dolía demasiado, apenas podía moverse, sus ojos se empecinaban en no abrirse, le pesaban, su respiración casi inaudible al oído humano, solo su mente funcionaba a duras penas, el dolor era tan intenso que su mente se negaba a admitirlo, a seguir adelante, simplemente aquel húmedo calor en su espalda parecía dejarlo en un sopor casi mortal...
Intentó abrir los ojos para ver donde estaba pero no lo consiguió, en cambio percibió sonidos, voces lejanas que hablaban de sangre, muerte, inconsciencia...y se envolvió en una negrura eterna...
Cuando al fin abrió los ojos percibió un sitio extraño, una arboleda cerrada, con unos árboles extraños, árboles de diferentes colores, de hojas que jamás había visto en su vida, y con movimiento "humano", aunque pareciera mentira aquellos árboles tenían ojos y brazos como en los cuentos infantiles, estaba claro que deliraba, eso no existía en ningún plano real, sin embargo no le dolía la espalda, no sentía ese calor húmedo y sus ojos habían conseguido desplegar los párpados, seguía escuchando murmullos: parece que despertó, déjenlo descansar...
Volvió al sueño pensando que todo era una elucubración de su mente, pero...
-No estás alucinando, llevas 3 días inconsciente, y a tu pregunta de si nosotros te hemos cuidado, te diré que sí, que hemos sido nosotros los que lo hicimos, llegaste demasiado herido para volver a volar.
-A volar??-su mente confusa-
-Sí, tus alas estaban casi arrancadas de tu espalda, no cesaban de sangrar, no recuerdas eso?
-En realidad no recuerdo nada, mucho menos que tuviera alas, creo que estoy soñando, no puedo hablar con un árbol ni tener alas, eso es imposible, yo debo ser un simple humano.
-Bueno, diría que lo último que eres, es un "simple humano", puedes observar tus alas, sobre tu amnesia no podemos hacer nada, pero tus heridas físicas están todas completamente curadas, mientras recuperas la memoria puedes quedarte con nosotros si gustas, no haremos preguntas somos una sociedad pacífica nunca nos inmiscuimos en asuntos celestiales, terrenales o infernales.
-Una única pregunta vosotros sabéis quién soy?
-Sí, lo sabemos, pero no podemos interferir en tu vida, diciéndote quién eres y qué haces.
-Lo comprendo, acepto vuestro ofrecimiento, esto parece un buen lugar para reponerse de las heridas."
Aquél día llegó a ese lugar único donde solo unos afortunados llegaban, él lo había sido y mucho, aquellos ancianos árboles le enseñaron muchísimo de como actuar y comportarse frente a algunos acontecimientos que podrían sobrepasarlo, a lo largo de los siglos había necesitado en varias ocasiones regresar a ellos, por el mismo motivo...ella.
Hoy también estaba allí por el mismo motivo, tenía una misión encomendada, después de tanto tiempo se debería enfrentar a su pasado y realmente no estaba preparado para eso.
-No vas a decirme nada viejo?
El árbol abre los ojos, sonríe y da permiso al resto para que se hagan presentes.
-Esperaba que tú saludaras primero.
-Sí, siempre cortés y políticamente correcto, no te cansas?
-A veces, te lo he dicho en muchas ocasiones, muchas veces quisiera no actuar según el protocolo establecido, de vez en cuando, lo hago, tú deberías saberlo bien...
-Sí, mis heridas, el tiempo en paz que viví aquí...nunca lo olvidaré, nunca volveré a tenerlo, a veces pienso en volver a perder la memoria para regresar aquí...
El viejo árbol sonríe, sabe lo que le ocurre, su más amado pupilo no pudo contradecir a su destino, no pudo desde el día en que nació, unido a ella, sin poder tenerla nunca, y ahora debía ser él quién la ajusticiara...
-Quizás puedas quedarte un ratito, prometo no decirlo a nadie...
Aquel joven sonríe al viejo árbol.
-Lo sé, te agradezco que hasta estés dispuesto a contradecir todas las leyes por mi, pero solo vine a respirar un ratito con vosotros, viejo sabes lo qué tengo que hacer, verdad?
-Sí, lo sé-contesta con amargura-
-No sé cómo enfrentarme a este momento, desde que recuperé la memoria la he evitado, he estado lo más lejos posible de ella, no sé por qué tuvo que resucitarla....
-Este día sabíamos todos que llegaría, desde la última vez que te besó, todos sabíamos que serías tú el encargado de cerrar el círculo.
-El circulo...bonita forma de decirlo! He venido a pedirte algo antes de encontrarme con ella, sé que va contra todas las leyes, y entenderé que te niegues, no te preocupes porque no es algo que vaya a influenciar en lo que siento por ti, en mi agradecimiento, en todo el cariño que te tengo viejo, solo que antes de irme, podrías hacer que la recordara aquí?
-Estás seguro de querer vivir esa experiencia?
-Sí, por favor...
-No importa cuántas leyes inflija, esto es algo que he esperado desde el día que recordaste quién eres, preparado??
-Sí..-aunque su voz tiembla-
Se cierra el círculo de árboles, todos cierran los ojos, excepto el viejo que mira y llora...
-Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
-Ummm, por qué gritas mujer???
-No sé, me apetecía hacerlo^^
-Deberías dejar de hacer eso, ya estoy mayor para estos sustos tuyos...
-Ja Ja jA!! mayor dices??!! yo diría mejor anciano senil, pero si a ti te apetece decir mayor, yo intentaré entenderlo...
-A ver mocosa, cómo te atreves a insultarme de esa forma y en mi casa, en mi cara???
-Ummmm....no sé quizás porque me gusta verte sufrir un colapso, porque te pones todo rojo a punto de explotar...es gracioso verte así, y yo me divierto mucho jajajaja
-El día que ponga tu culo del color de mi cara no vas a divertirte tanto mocosa-su sonrisa maliciosa-
-Nah, no te atreverías, yo soy un angelito delicioso, precioso, encantador(le pone ojitos), cómo podrías azotarme??(cara de ángel)
-jajajajaj Tú, un angelito??? le temo menos al demonio, y créeme que sé lo que me digo porque lo conozco en persona, antes que tú, por dios mujer eres realmente!!!.....
-Encantadora??Angelical??Amorosa??Simpática??Un cúmulo de perfecciones?? ^^
-Sí, precisamente en esos adjetivos pensaba yo...
-Lo sé, no hay otros para mi...^^
-Jajajaj qué no hay otros??? sí muchísimos, como millones pero ninguno de esos, y el mío favorito es "demonia"..
-Ohh qué grosero!! Yo?? no volveré a hablarte nunca más en la vida, nunca, nunca, nunca ea....
-Ummm qué placer!! Hazlo por favor, al fin silencio!! -sonrisa malvada la de él-
Ella pone los ojos en blancos
-Bueno si mi silencio te provoca placer entonces...no callaré nunca!!! jajajajajaj
-Ven demonia mía...
-A sus órdenes ángel mío...
Él despliega sus alas, abre sus brazos y ella se reúne con él en ese espacio, mientras sus labios se unen, escribiente y juez, unidos por un lazo invisible siempre..."
Cesan las imágenes, él despliega sus alas como en ese íntimo momento, desgarrador sonido escapa de su garganta, mientras los árboles lloran a su amado juez, el ángel justiciero, debe cumplir tan sólo con una palabra...
-No lo hagas-suplica el viejo árbol-.
Él lo mira, sus ojos arrasados por las lágrimas, su cuerpo temblando y herido como el día que llegó a aquel sitio.
-Tengo que hacerlo, tengo que reclamarla, ella es mía viejo, y antes que otro la castigue yo tengo que volver a verla, solo he de decir mi nombre para que ella lo escuche y empiece el juicio...
-Suerte hijo mío.
-Yo soy Yue, lo oíste escribiente?????
Aquella frase resonó en todo el espacio, tierra, cielo e infierno...las sacudidas sónicas sacudieron a Perséfone, Chronos y por fin ella...
-Te oí amor...
La respuesta de la escribiente paraliza el tiempo, se acerca el juicio...
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